88-year old Thalji Mahmud Awad.
Militares israelíes y colonos ilegales atacaron a l@s habitantes de Awarta, cerca de Nablus, mientras recolectaban tranquilamente las olivas. Thalji Mahmud Awad de 88 años fue empujado hasta caer al suelo por un grupo de 10 colonos , haciendo caso omiso a sus ruegos: “En nombre de Dios, por favor parad”.
El miércoles,16 de noviembre, a las 9,5 am un grupo de cinco observadores de los Derechos Humanos (HROs) del ISM fueron cerca del pueblo de Awarta. Un grupo de un@s 30 palestin@s esperaba el permiso de soldados israelíes y de la policía para acceder a sus campos de olivos. Después de la identificación de todas las personas del grupo y de haber revisado, una a una, las bolsas y demás utensilios de recolección que llevaban l@s palestin@s y sus burros, los soldados les permitiron el paso. Comenzaron a recolectar las olivas en sus tierras localizadas detrás de la valla de la colonia De Itamar. Esta valla es ilegal incluso por las leyes israelíes y fue construída rápidamente antes de la recolección de la oliva el año pasado. Es un ejemplo más de la anexión de tierras palestinas a las colonias.
Los soldados denegaron el acceso al grupo de HROs y les impidieron pasar al otro lado de la valla con la excusa de que había orden de “zona de restricción militar”. Después de las 10, l@s HROs (situados muy lejos de l@s agricultores palestinos) pudieron descubrir a un grupo de colonos corriendo por lo alto de la colina. A las 10.45 desafiando la orden del ejército israelí sobre “zona de restricción militar”, l@s HROs anduvieron hasta las proximidades de la valla y pudieron ver y oír a un grupo de colonos corriendo y gritando en la colina de en frente. Un@ de l@s HROs preguntó a los soldados que era lo que pasaba, y si se habían enviado algún soldado o policía para intervenir en el asunto. Los soldados contestaron que sí lo habían hecho.
Al mismo tiempo más o menos, un grupo de 10 niños colonos atacaron a Thalji Mahmud Awad, que se encontraba con su familia recolectando olivas. Hadj Thalji, nacido en 1917, recibió golpes incluso necesitó asistencia médica por las heridas de su brazo izquierdo. Todavía no se sabe la gravedad de sus heridas. Las alforjas de su burro, así como las cosas que había dentro fueron robadas por el grupo de colonos. Un policía que habló muy brevemente con él, se negó a recoger sus declaraciones. Se limitó a decirle que fuese al hospital para que le hiciesen un chequeo médico y que con los resultados y las fotografías correspondientes, se acercara al DCO el domingo.
Cuando se les preguntó a los soldados sobre el apaleo y el robo a Thalji Mahmud Awad, estos negaron que hubiera ocurrido, incluso se atrevieron a negar que hubiera habido incidente alguno con los colonos.
En otro incidente que tuvo lugar aproximadamente a las 11.15, un soldado se aproximó a Sa’ad Awad de 40 años que hablaba por el móvil, y le gritó que estaba prohibido hacerlo. Cuando el soldado fue a quitarle el teléfono a Awad, Abdul Salaam de 35 salió a su encuentro para proteger a Awad. El soldado golpeó a Abdul y tomó su documento de identidad, al mismo tiempo que le decía que tenía que regresar a Awarta y que no podía trabajar más. En un acto de solidaridad con Salaam, el resto de l@s recolectores, dijeron que si Abdul Salaam no podía trabajar que ellos tampoco lo harían.
En este mismo incidente, un soldado dijo a Sa’ad Awad: “Ésta no es tu tierra, tu tierra está en Jordania”. Awad le respondió: “Ésta es la tierra de mi padre y antes fue del padre de mi padre”. Entonces el soldado amenazó con matar a Saad Awad, diciéndole: “Te dispararé”.
Después de haber abandonado la recolección en solidaridad con Abdul Salaam, los soldados les niegan la entrada denuevo; a pesar de que Rabbi Arik Ascherman, de Rabinos por los Derechos Humanos, haya hablado con el oficial al cargo de conceder los permisos a l@s agricultores para la recolección de la cosecha. Los soldados critican a Rabbi Ascherman y al resto de los rabinos de RHR, llamándolos “goyim”.
A las 12 los soldados volvieron a revisar los documentos de identidad de tod@s incluido el de Thalji Mahmud Awad, y denuevo buscaron en sus bolsas y alforjas. Entonces los soldados permitieron a l@s habitantes de Awarta volver a su tierra y continuar la recolección. Los soldados se rieron de la propuesta de l@s HROs, para que se les permitiera acompañar a l@s palestin@s y así prevenir cualquier tipo de agresión.
Bajo la presencia de bastantes colonos, l@s agricultores continuaron su trabajo hasta la 1. Entonces se marcharon de nuevo a Awarta dejando algunos olivos sin cosechar.
The Itamar fence.
Soldiers socializing with one of the settlers after the attacks.
Palestinian farmers waiting near the illegal Itamar fence.